lunes, 1 de agosto de 2011

El final de la cuenta atrás

Para comenzar, comentar que en el post anterior me salté mi regla auto impuesta de poner títulos de pelis a mis post. El contenido de los post, solo se parece al guión de la peli en uno o dos detalles  nada más (nota aclaratoria para los que aún no se hubiesen percatado del detalle, cosa difícil, ya que mi número de lectores es reducido pero listos como nadie). Hoy retomo la regla.

El final de la cuenta atrás ya ha comenzado, me quedan cuatro días para irme de vacaciones, cuatro días que voy a disfrutar de Madrid con poco tráfico, cuatro días que voy a poder salir a cenar sin haber hecho reserva previa, cuatro días que tengo para decidir qué día me va mejor ir a la peluquería y que no tenga que llorar y mendigar que me hagan un huequito. Cuatro días para decidir que meter en la maleta (este año sí que voy a conseguir meter sólo lo que voy a usar).

Cuatro días para dejar ultimados los detalles del comienzo de cole en Septiembre de NiñoNinja. Comienzo del cole y comienzo de una nueva etapa educativa, primero de primaria. Cuando pienso en ello, tengo una sensación rara en la boca del estómago… Madre mía, YA…. Primaria… pero si es un bebé aún… Cuando le miró ya no veo a ese angelote rubio de rizos indomables, veo a un niño que ya no es tan rubio  y que poco a poco ha ido perdiendo los rizos, al igual que esa cara de bebote que tenía y esa “barrigoncha” de bebé que ahora parece que se le ha “escurrido”. Me da como cierto vértigo, ver que cada vez es más independiente y que para tristeza nuestra, ya no nos llama cuando quiere algo de una estantería o que le pongamos una peli o un juego en la Play.

-          Mamá… ya soy mayor.. yo ya sé…

En fin, esas cosas pasan cuando se hacen mayores.

Este año el Sensei no tiene vacaciones que coincidan con nosotros, y me voy a tirar tres semanas a solas con NiñoNinja.

Tres semanas en las cuales vamos a bajar a la playa, si podemos casi a diario (si puedo yo quiero decir) que no me agote a la primera semana de bajar con cubos, palas, raquetas, la tabla de BodySurf, la bolsa de las toallas y bañadores de repuesto, la bolsita isotérmica con fruta para media mañana y una botella de agua, las gafas de bucear, las cremas solares, etc… (espero no añadir muchos más “etc” a esa ya de por si sobrada intendencia).

Afortunadamente para mis lumbares podré contar con la inestimable ayuda de mis padres (AbuNinjas) que soportaran estoicamente el paseíto diario a la playa cargados como si fuésemos a montar una concentración del 15M en ella.

Tres semanas para las cuales he preparado una carpeta de deberes para NiñoNinja que parece que en lugar de repasar el curso terminado, va a prepararse para el MIR. Todo ello para que no pierda el “ritmo” de lo aprendido y para que deje a los AbuNinjas dormir la siesta en esas horas infernales en las que no hay otra cosa que hacer que no sea estudiar o ver los “cotilleos” de cualquiera de las cadenas de televisión. Cosa que como es evidente, no le dejo ni ver la cabecera, no porque no entienda lo que dicen, no, lo entendería TODO, es más.. estoy segura que la capacidad intelectual de un niño de 5 años y medio es superior a muchos de los colaboradores de esas tertulias.

En la carpeta de los deberes llevo, cuadernillos rubio que para mi sorpresa después de 55 años, dichos cuadernillos se encuentran entre los más buscados para que nuestros peques refuercen en su caligrafía, sus operaciones y cálculo. También llevo un cuaderno cuadriculado para hacer dictados, cuentos varios para la lectura, un estuche de piratas con  lápiz,  goma de borrar Milan (que recuerdos), ceras y lápices de colores, ah y este año como novedad llevamos acuarelas, a ver si con suerte se despierta el instinto pictórico de NiñoNinja, que hasta la fecha es nulo. Prefiere que le ponga dos hojas de “cuentas” antes que tener que dibujar algo en un folio en blanco. Espero que cuando tenga edad de ello y llegue a la carrera (de mayor quiere construir aviones) el dibujo técnico se le dé mejor, claro que ahora con esto de los ordenadores, el rotring lo va a pillar poco.

Tenemos tres semanas por delante para intentar que coma en un tiempo razonable, comer lo que se dice comer, come bien… ahora bien… lento, más que el caballo del malo. No entiendo como en el comedor del cole siempre nos dicen que se sienta en la mesa de los “rápidos” y en casa necesitamos una eternidad para que se coma la comida antes de que caduque. Creo que voy a utilizar la estrategia que en el fondo usan en el cole. O comes en el tiempo establecido (una horita voy a fijar) o no sales a jugar al patio. En este caso yo voy a sustituir el patio por la feria del “puebloplaya” al que vamos. A mi regreso prometo contar este nuevo reto y si ha sido superado con o sin éxito.  Por mi salud mental (y la de los que me rodean) espero que con éxito, porque esta es una de las cosas que hace que me replantea la maternidad como ese momento mágico, JA.

Tenemos tres semanas para dormir en la misma habitación. Aprovechando que el Sensei no estará, voy a permitirme el capricho de dormir en la misma habitación que NiñoNinja (capricho para mí, no porque él lo pida). Cada uno en su cama eso sí, que el pequeño cada vez tiene menos de pequeño, pero en la misma habitación. Voy a permitirme quedarme dormida mirándole desde mi cama, con ese poquito de luz que entra por la ventana. Voy a permitirme levantarme por la mañana y salir de puntillas de nuestra habitación mientras él continúa durmiendo y mirar como en su cara y respiración se refleja que aún está placida y relajadamente dormido.

Tenemos tres semanas para llamar todos los días al Sensei, que estará ejerciendo de Rodriguez, con la casa toda para él, la cama toda para él, la play toda para él, las cervecitas todas para él, el silencio todo para él, y la añoranza (también) para él. Sin acritud oigaaaa.

Tendremos tres fines de semana que el Sensei vendrá a “puebloplaya” a compartir con nosotros todas esas cosas que voy a compartir yo sola, léase por ejemplo:

·         Intendencia de bajar a la playa
·         Deberes de NiñoNinja
·         Relajadas horas de comidas y cenas
·         Increíbles momentos de

Mamaaaaa quiero ir, Mamaaaaa quiero ir, prometo comer más rápido luegoooooooooooooo, Mamaaaaa quiero ir, de verdaddddd, Mamaaaaa quiero ir, Mamaaaaa quiero ir, vamos a la ferrrrrrrrrrrrrrria, Mamaaaaa quiero irrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrr.

Espero por el bien de los que me rodean que el Santo Creador sea benévolo y me conmute la pena en estas tres semanas.

Conclusión:

El año que viene no me voy a creer que al Sensei no le digan las vacaciones que NO va a tener hasta que ya hubiésemos pintado todo en casa, para mí que este pensó;

-          Si le digo que no tengo vacaciones, me endosa el marrón de pintar para mí solito en mis NO vacaciones. Listo…. que eres un listo…

Por cierto, por si no te lo hemos dicho, te vamos a echar mucho de menos.

1 comentario: